La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, continúa con el proceso de escucha y participación que inició ya en noviembre para avanzar, con el máximo consenso posible, en la transformación que está impulsando en el Casco histórico.

Un cambio que vendrá de la mano no solo de tres ambiciosos proyectos de peatonalización que cuentan con financiación europea, sino también con la implantación de una Zona de Bajas Emisiones en el entorno y con la modificación de la Ordenanza Municipal de Circulación que afectará a toda la ciudad.

Precisamente, al amparo de ese procedimiento participativo, tuvieron lugar, hasta la fecha, diferentes reuniones con representantes de la hostelería y del comercio, entre otros colectivos, así como con los técnicos municipales. Y ayer, la reunión se dedicó a atender las inquietudes de las personas residentes en este barrio de la capital. Un encuentro que se celebró, con un elevado aforo, en el Centro Cívico Uxío Novoneyra.

La regidora lucense valoraba muy positivamente el intercambio de opiniones que se realizó durante el mismo “porque lo permitirá completar, con la perspectiva de quien vive en esta área, las medidas que resulta necesario implementar para mejorar la convivencia y la compatibilidad de actividades que se dan intramurallas con el objetivo de incrementar el confort y el bienestar de toda la población”, señaló Lara Méndez.

La alcaldesa agradeció la asistencia al acto “en tanto que nos permitió acercarles de primera mano, con todo el rigor y la información correcta y detallada, aspectos tan importantes como el calado de las obras que se van a realizar y su previsible cronología y desarrollo, pero también aspectos técnicos relativos a la creación de la ZBE que la misma consultora adjudicataria del proyecto explicó, incidiendo en la obligatoriedad de acometerla y desmontando temores sobre las repercusiones que tendrá su entrada en vigor”.

Igualmente, Méndez se comprometió a estudiar la viabilidad de las propuestas realizadas en el transcurso del debate en el que los tenientes de alcaldesa, el portavoz del Gobierno local, Miguel Fernández y la concelleira de Gobernanza, Paula Alvarellos, también trataron de dar respuesta a las dudas expuestas sobre diferentes cuestiones relativas a la habitabilidad en esta parte de la capital.

Para concluir, la regidora abrió la posibilidad de mantener una segunda reunión vecinal en el barrio del Casco histórico y recordó que el proceso participativo sigue abierto, invitando a la ciudadanía a presentar sus sugerencias a través del correo axenda.urbana@lugo.gal.

“La implicación social es, para nosotros, tremendamente relevante, porque tenemos la firme voluntad de que las actuaciones que ejecutemos disfruten del beneplácito general, por eso continuamos receptivos a sus opiniones con el objetivo puesto en seguir ganando espacios para las personas, reduciendo el tráfico y renaturalizando los entornos para aminorar la contaminación, los niveles de ruido y la presión sobre el patrimonio pero, sobre todo, para mejorar la calidad de vida y dinamizar social y económicamente el Casco histórico”, concluyó Lara Méndez.