El Teniente de Alcaldesa y edil de Medio Ambiente, Miguel Fernández, supervisó el inicio de los trabajos impulsados por la regidora Lara Méndez en el marco de la estrategia de mejora de la accesibilidad de la ciudad con el fin de mejorar la comunicación entre el parque Marcos Cela con el mirador de Volta da Viña. Se hará mediante la instalación de un nuevo paso de cebra inteligente. Será el segundo paso lumínico, capaz de detectar la presencia de peatones, que se instale en la ciudad, luego del recién estrenado en la Rolda do Carme.

Lara Méndez explicó que "este martes se llevaron a cabo los primeros trabajos con el extendido de una capa de aglomerado para la ejecución del badén sobre el que se señalizará el paso de cebra; posteriormente se instalará un nuevo cuadro eléctrico en el margen derecho de la calzada, en sentido descendente, en el entorno del mirador; y, hecho esto, se procederá a colocar nueva iluminación y balizas que mejorarán la seguridad tanto de los propios conductores, como de los peatones y ciclistas -ya que por la zona transcurre la senda verde ciclista urbana-".

En efecto, el ámbito de actuación del proyecto confluye con las obras de la nueva senda ciclista en la rúa Santiago, actualmente en ejecución. "Para conectar el mirador de Volta da Viña con el parque Marcos Cela de la forma más segura posible se exponen compartir un pequeño tramo del carril bici, alargando y reforzando la señalización de este itinerario, para que tanto el ciclista como el peatón puedan circular con normalidad".

El proyecto del carril bici preveía la colocación de separadores viales ovalados, que serán sustituidos en el proyecto actual por bolardos convencionales para incrementar su visibilidad. También se modifica el color previsto en este ámbito para indicar la existencia de un tramo compartido con el peatón y diferenciarlo del resto del tramo.

Hace falta subrayar que en la actualidad no existe ningún tipo de comunicación entre el mirador Volta da Viña y el parque Marcos Cela. Aunque la distancia entre uno y otro es de apenas diez metros, existe un desnivel importante que dificulta mucho la conexión entre ambas dotaciones. Este desnivel está originado por un afloramiento rocoso que también condicionó y limitó la sección de calzada en esta zona, de forma que existe acera únicamente en el sentido de bajada, del lado del mirador. "Las características de la zona obligan a diseñar un tramo compartido entre bici y peatón, ante la imposibilidad de ejecutar una acera a continuación del carril bici, sin producir un impacto paisajístico y económico de envergadura", explicó el edil.

Adecuación de la rúa Santiago

Con la ejecución del carril bici, esta tenía una velocidad de diseño de 50 km/ h será ahora de 20 km/ h, y el carril de bajada compartirá calzada con el carril bici, mientras que el de subida tendrá el carril bici independiente, según lo previsto en el proyecto.

Por otra parte, la iluminación actual es únicamente la viaria, dispuesta sólo donde hay acera, y es insuficiente para cruzar en condiciones de seguridad. Por eso se llevará a cabo un refuerzo de la misma mediante la disposición de luminarias activadas por sensores en el propio paso y en el tramo de acceso al parque.

Se aprovechará el acceso al parque existente en la actualidad, mediante escaleras de piedra, y se comunicará a través de un pequeño tramo del carril bici con el mirador. Emplear el carril bici surge, asimismo, de la necesidad de situar el paso de cebra en el tramo recto de la rúa Santiago, a una distancia suficiente de los tramos en curva que garantice la seguridad del cruce.

Para efectuar el cruce peatonal se proyecta la ejecución de un paso de cebra inteligente, esto es, con iluminación automática que se activa en cuanto el sensor detecta la presencia de peatones, aumentando la intensidad lumínica de un 30 a un 100%, lo que provoca una llamada de atención al vehículo que se aproxima sobre la presencia de un peatón que cruza. La mejora de la iluminación se complementa con la elevación del paso, que obliga a los conductores a reducir la velocidad.

Asimismo para reforzar la seguridad del recorrido peatonal compartido con el carril bici que transcurrirá en paralelo con la vía de circulación de vehículos, se intercalará, entre los elementos de protección comunes (bolardos), hasta el acceso al parque Marcos Cela, una iluminación acorde con el entorno, el fin de conseguir una seguridad ambiental para la zona en la que se sitúa y cuya función será el guiado visual tanto para la circulación de los vehículos como de peatones.

Toda la actuación forma parte de la estrategia  DUSI Muramiñae “Da Muralla ao Miño”, cofinanciada al 80% por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Dentro de los objetivos previstos en la Estrategia DUSI, se encuentra la mejora de la comunicación entre la trama urbana y el río Miño, en el marco del cual se encuadra el presente proyecto.

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• La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, sobre el paso de peatones inteligente, en a Volta da Viña | Descargar mp3