La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, comparecía esta mañana junto al Intendente de la Jefatura de la Policía Local, Jesús Piñeiro, para hacer un balance de las intervenciones desarrolladas por este Cuerpo en los últimos meses en lo que tiene que ver con el control a establecimientos públicos y que se saldó, desde el pasado 22 de abril – fecha en la que se dio por concluida la fase aguda de la pandemia – con 62 denuncias y 8 locales precintados.

“Queremos poner en valor el trabajo desarrollado y dar cuenta de los resultados de la tarea previa de coordinación que Alcaldía y Policía realizamos conjuntamente cada semana con un claro objetivo: garantizar la convivencia y la seguridad ciudadana, atendiendo también a las inquietudes vecinales”, señaló la regidora.

Lara Méndez explicó que, tras la recuperación de la normalidad, después de considerarse superada la crisis sanitaria, y con el progresivo levantamiento de las diferentes restricciones, una parte importante de las funciones que los agentes ejercieron durante estos meses fue la de atender las quejas por altercados y ruidos relacionados con un número muy minoritario de locales de hostelería.

“El cumplimiento de la normativa por la que se rigen estos negocios es para nosotros una preocupación fundamental, de manera que la directriz establecida desde el inicio del mandato fue la de estrechar la vigilancia a los mismos con los dispositivos que resulten necesarios para poner fin a los perjuicios que puedan ocasionar. Siempre dentro de las competencias que nos corresponden, queremos enviar un mensaje, tranquilizador a la sociedad pero contundente con aquellos que contravienen la ley, de que el Ayuntamiento de Lugo y la Policía Local están actuando para congeniar el beneficio empresarial con los derechos de todas y todos, tanto al ocio como al descanso, porque los tres ámbitos deben ser compatibles”, afirmó la alcaldesa.

De este modo, Jesús Piñeiro detalló que las 115 inspecciones que se llevaron a cabo a establecimientos en los últimos diez meses se saldaron con 21 actas de infracción por exceder el horario de cierre, 14 actas por haber instalado un equipo de reproducción musical sin autorización, 7 actas por no disponer de título habilitante y otras tantas (7) por ejercer la actividad con las puertas abiertas cuando, por su categoría, lo han prohibido, más allá de otra más (1) por sacar consumiciones a la vía pública y una docena (12) por infringir la normativa de espectáculos públicos.

Del conjunto de estos controles (115), 47 se centraron en locales del recinto amurallado y los 68 restantes se llevaron a cabo en establecimientos asentados en 15 rúas de la capital, 5 de ellas pertecentes al barrio da Milagrosa. Siendo la rúa Galicia la que concentra un mayor número de intervenciones (23), seguida por la rúa Catedral (14).

El Intendente Jefe refirió, igualmente, que en este tiempo se precintaron 8 locales, entre los que figura un centro de hípica que carecía de licencia. De los siete restantes, correspondientes con el sector hostelero, 2 se encuentran en el Casco histórico (rúa Catedral); otro na Milagrosa (rúa Pintor Villamil) y los otros cuatro se ubican en diferentes zonas de la ciudad: rúa Galicia, San Roque, Salvador de Madariaga y Doutor Fleming.

Respecto a este último, la regidora, Lara Méndez, anunció que el Ayuntamiento viene de revocarle la licencia a esta discoteca después de notificarle el pasado septiembre la suspensión de actividad por considerar probado que con ella incurría reiteradamente en episodios de contaminación acústica.

“Este negocio fue denunciado en diferentes ocasiones que derivaron en un total de 9 intervenciones por parte de la Policía Local y en la apertura de un expediente que finaliza, finalmente, con la pérdida de validez del título habilitante del que disponía, cumpliendo así el compromiso dado a las y a los residentes de la zona, con los que se reunió en varias ocasiones, de actuar categóricamente contra los establecimientos que inciten a la comisión de altercados”, manifestó Méndez.

Este no es el único local que cierra sus puertas por determinación municipal ante la comisión de infracciones de forma continuada, sino que en diciembre de 2020 se decretaba la ineficacia de la licencia de un café – bar de Camiño Real, y se abrieron sendos expedientes a las cafeterías La Máquina (Camiño Real) y La Barrica (Salvador de Madariaga) ante la proliferación de disturbios que propiciaban en el entorno.

Antes de finalizar, la alcaldesa anunció un refuerzo de los dispositivos de vigilancia, especialmente en las localizaciones más conflictivas de la capital y destacó la implicación de los efectivos del Cuerpo en el desempeño de su labor, un cometido en el que se incluyó la colaboración estrecha con la Policía Nacional a través de la realización de dispositivos conjuntos.

“La coordinación de las fuerzas de seguridad en Lugo es permanente – sostuvo Lara Méndez – en la búsqueda de atajar cualesquier problemática que altere la tranquilidad del vecindario o comprometa la convivencia pacífica con la que nos identificamos las y los lucenses”, concluyó.

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