El edil de Urbanismo Sostenible, Miguel Couto, acudía esta mañana junto a una delegación de técnicos municipales, y acompañados por agentes de la Policía Local, al edificio número 48 de a Ronda da Muralla donde estaba previsto realizar una inspección del inmueble para tomar las mediciones que permitirían acometer la rehabilitación subsidiaria del mismo. Una comprobación que, finalmente, no se pudo llevar a cabo al no contar con la autorización de los propietarios, debidamente notificados en tiempo y forma.

"Lamentablemente, en una nueva ocasión, nos encontramos en esta tesitura de no poder avanzar en la tramitación administrativa de este expediente y de no poder intervenir sobre la construcción debido a la falta de colaboración de sus titulares que, desde hace 15 años se niegan, de forma persistente, a atender los requerimientos del Ayuntamiento", destacó el concejal.

Miguel Couto señaló que el Servicio de Urbanismo lleva emitidos desde 2001, año en el que se advierte por primera vez de la necesidad de actuar sobre la edificación, más de una treintena de resoluciones, instando a sus dueños a corregir las deficiencias que presenta y que comprometen la seguridad ciudadana.

"De hecho, hasta el momento, la administración local impuso un total de ocho multas coercitivas al respeto por importe de 43.000€ sin que habían causado efecto alguno, por lo que, llegados a este punto, lo que tenemos que anunciar es que el Ayuntamiento procederá a solicitar la oportuna autorización judicial para continuar con el procedimiento de forma subsidiaria. Nuestra máxima preocupación es la de garantizar la protección de los viandantes y, precisamente por eso, evitaremos que se siga retrasando su reforma de manera injustificada", subrayó el responsable de Urbanismo Sostenible.

Miguel Couto refirió también que la obra que se iniciará de forma inminente en el sonar colindante a este, en la esquina con Nicomedes Pastor Díaz, podría provocar vibraciones en el terreno y en los muros contiguos a la vivienda, "el que puede derivar en su derrumbamiento parcial o total ante la falta de estabilidad estructural e incluso puede propiciar la caída de elementos constructivos en la acera y en la calzada, de ahí que la intervención en el nº48 sea urgente e inaplazable", advierte el edil.

Los trabajos que, de forma subsidiaria, asumirá el Ayuntamiento tienen un costo estimado de 87.434,50 euros, tal y como recoge la Memoria Valorada que Evislusa elaboró en 2017, mediante encargo de gestión, y consistirán en asegurar el inmueble e impedir que nuevas filtraciones de agua incrementen su deterioro, con el objeto de recuperar el tránsito peatonal a su lado. Para llevarlos a cabo será necesario modificar los límites espaciales de la vía, asi cómo de las plazas de estacionamiento próximas.

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