La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, acompañada del teniente de alcaldesa y responsable de Medio Ambiente, Miguel Fernández, supervisó este lunes el avance de las obras de peatonalización y humanización de la Calzada da Ponte, que comenzaron el pasado mes de mayo.

“Mediante esta actuación mejoraremos y humanizaremos este itinerario, por lo que pasa el Camino Primitivo, Patrimonio de la Humanidad, y la Vía Romana XIIX”, recordó la regidora, que recordó también que “actuaremos en los pasos inferiores, que regenerarán visualmente y se dotarán de mayor luz, siguiendo criterios de eficiencia energética y de género; al tiempo que si llevará a cabo la ocultación de servicios, la reparación de la red de saneamiento, así como la creación de zonas de descanso con parklets urbanos y la instalación de nuevo alumbrado”.

La alcaldesa, acompañada de vecinos de la zona, atendió sus sugerencias, “como ya estuvimos haciendo este tiempo de obras para poder darles respuesta siempre que podemos”.

Méndez explicó que “las obras avanzan a buen ritmo y actualmente ya se ejecutaron casi el 50% de los trabajos previstos, que se están realizando en tres fases diferentes, debido a las característas de la intervención”. La primera fase comprende el tramo entre la Rúa Santiago y el paso inferior de la Rolda do Carme; la segunda, el tramo existente entre el paso inferior de la Rolda do Carme y el paso inferior N-VI; y la tercera, el tramo desde el paso inferior de la N-VI hasta el Ponte Romano.

El ámbito de actuación, de 640 metros de longitud, abarca la explanada delante del Ponte Romano, la rúa Calzada da Ponte, el acceso desde el enlace de la Volta da Viña con la N-VI y los ramales de San Lázaro y de acceso a la N-VI, así como el vial hacia el Balneario, aunque no se llegará hasta las termas porque Patrimonio de la Xunta de Galicia no lo autorizó.

Lara Méndez recordó que se trata de una “ambiciosa actuación de regeneración y recuperación de los trayectos y espacios que van desde el Ponte Romano hasta la rúa Santiago, una de las zonas más hermosas de la ciudad y de mayor riqueza patrimonial e histórica ya que coincide en su totalidad con el Camino Primitivo y parte de la Vía Romana XIX”, sostuvo.

“Así, esta actuación los permitirán avanzar en nuestro objetivo de que Lugo deje de vivir de espaldas al bastión de un envidiable patrimonio natural como es el Miño, contribuyendo a mejorar uno de los principales accesos al río e incrementando la longitud de las sendas peatonales y ciclistas para acceder a la zona fluvial”, señaló.

Con la peatonalización se reducirá el paso de vehículos por este itinerario, reduciendo los niveles de contaminación medioambiental y acústico, que ayudará a la puesta en valor de esta riqueza patrimonial y mejora de la calidad de vida del vecindario, “siendo una zona donde es paso de numerosos peregrinos y turistas que visitan nuestra ciudad”.

La alcaldesa señaló, asimismo, que el estacionamiento de los residentes está garantizado porque también se dejan plazas para las viviendas que no disponen de garaje y, por lo tanto, de vado.

Trabajos que se están adjudicando

Las obras incluyen diferentes tipos de actuaciones:

• La ocultación de aquellos servicios que estén aéreos: iluminación pública, telefonía, baja tensión.
• La reparación de la red de saneamiento existente, que se encuentra en mal estado y presenta diversas fugas y roturas.
• La demolición de pavimentos en la totalidad del ámbito de actuación, que serán sustituidos por otros más adecuados para el tráfico peatonal y más respetuosos con el ámbito de protección patrimonial.

En cuanto a estos pavimentos, se definieron tres tipos diferentes, acordes al ámbito de aplicación. Así, figura un compuesto por losas de piedra de granito silvestre gris o blanco, seleccionado, que se usará en toda la rúa. Otro la base de piedra de granito Rosa Porriño, seleccionado, que se instalará entre la Rúa Santiago y Paso Inferior de la Rolda do Carme, para definir las zonas de aparcamiento para residentes. Y un tercero, de aglomerado asfáltico, para el Ramal de Incorporación desde Calzada da Ponte al Hostal San Lázaro, en el que se repone el firme existente, que se encuentra en mal estado.

La mejora de los 2 pasos inferiores existentes (en Rolda do Carme y en la N-VI) – con una gran complejidad técnica – que se regenerarán visualmente para darle un aspecto más respetuoso al ser Camino Primitivo, además de proceder a dotarlos de mayor luz, siguiendo criterios de eficiencia energética y de género.

Una actuación en la que se estudió especialmente la mejora de la accesibilidad, de manera que se dispondrá de un itinerario adaptado a la entrada desde la Rúa Santiago y, dado que la pendiente media de la rúa Calzada da Ponte es muy elevada, se realizará una actuación de substitución del pavimento actual.

Además, se repararán diversas escaleras de acceso a la Calzada da Ponte, en especial las que conectan el lado sur de la Rolda do Carme con la Calzada da Ponte, ya que al estar realizadas en adoquín, son causa de filtración de aguas de escorrentía a los edificios adyacentes; se cambiarán las barandillas peatonales que se encuentran en la parte superior de la Rúa Santiago por el modelo de la Rolda da Muralla - para armonizar el conjunto - y se instalará una escalera peatonal que conecte el barrio de San Lázaro con la Calzada da Ponte, además de sustituir la que hay actualmente en el área de descanso del camino de acceso al Balneario que se encuentra muy deteriorada.

Se llevará a cabo, asimismo, la humanización de todo el recorrido con zonas ajardinadas y mobiliario urbano respetuoso con el entorno patrimonial protegido.

Ya en la zona a regenerar de la Rúa Santiago, se colocará un parklet urbano, con jardineras y bancos de granito, incluyendo respaldo y asiento en madera tratada; además, se instalarán dos aparcabicis de acero galvanizado para 12 plazas y papeleras.

La obra está enmarcada en la estrategia DUSI Muramiñae, financiada al 80% por la Unión Europea, a través de los fondos FEDER. La estrategia DUSI del Ayuntamiento, Muramiñae, da Muralla ó Miño, tiene como objetivo integrar la ciudad y el entorno fluvial, rompiendo la discontinuidad urbana existente de norte a sur y de este a oeste.

Los trabajos, fueron adjudicados por importe de 1.371.748 euros a la empresa Ovisa Pavimentos y Obras, S.L.U., y tienen un plazo máximo de ejecución de 12 meses.

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