Jueves, último día para presentar ofertas a la construcción de la pasarela peatonal al Miño, que financian, junto al Ayuntamiento, los fondos FEDER

El presupuesto de licitación de esta nueva infraestructura, enmarcada dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado, financiada al 80% por los Fondos Europeos de Desarrollo Regional, es de 988.400 euros

Con esta actuación, el Gobierno responde a una importante, reiterada y histórica demanda de las personas seguidoras que acuden al Anxo Carro y de la ciudadanía lucense en general

Gracias a los fondos FEDER, Lugo tendrá una pasarela que permita una conexión segura y cómoda para peones y ciclistas; una medida de movilidad sostenible con la que el Gobierno transformará el carácter de la ciudad, dejando de darle las costas al Miño para convertirla en ciudad que prolonga los espacios públicos

Martes, 22 de enero de 2019
Fuente: 
Gabinete de Prensa

Este jueves, 24 de enero, es el último día para presentar ofertas para las obras de construcción de una nueva pasarela peatonal al Miño. Se trata de una iniciativa incluida en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI) de Lugo, denominado Muramiñae, de la Muralla al Miño; cofinanciada en un 80% con Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER). Cuenta con un presupuesto de licitación de 988.400 euros y un plazo de ejecución de 6 meses.

El objetivo de estas obras, que son una de las primeras obras de la estrategia DUSI en salir la licitación junto a las de descontaminación de los suelos del barrio del Carme, una vez que se concluyó la gestión de la redacción de los proyectos; es crear un nuevo itinerario para peones y bicicletas que favorezca el acceso desde el casco urbano a la zona del río, y en especial al campo de fútbol, con el fin de reducir la dependencia del uso del vehículo y mejorar la seguridad vial. Con esta actuación, el Gobierno responde a una importante, reiterada y histórica demanda de las personas seguidoras que acuden al Anxo Carro y de la ciudadanía lucense en general.

Las obras proyectadas consisten en la ejecución de un paso superior peatonal sobre la N-VI de hecho que se refuerce la permeabilidad transversal entre el casco histórico y una de las zonas más deportivas, así como a la zona de congresos de la ciudad. Esta pasarela tendrá uno de sus estribos en la isleta del enlace de la N-VI con el acceso al complejo deportivo y al campo de fútbol, siendo este el único espacio posible de desembarco. El otro de los estribos se localizará en la zona más próxima posible a la zona del aparcamiento del Pazo de Ferias.

Será una pasarela de arco metálico rebajado, que se considera a más adecuada debido a su luz libre de 45 metros, apoyada en dos estribos de hormigón, circulares de 2 metros de diámetro, que a su vez sirven de apoyo a las cuestas de acceso, también metálicas y con trazado en gusanillo. Se colocará también una baranda y pavimento de resina antideslizante.

El inicio de las obras de la pasarela está condicionado a la corporación del expediente administrativo de la correspondiente resolución de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Ministerio de Fomento; de hecho que de no ser estas favorables al proyecto presentado o de establecerse condiciones que habían modificado sustancialmente las unidades de obra del proyecto, que había modificado su presupuesto o que había supuesto un cambio sustancial en los términos de este expediente de contratación, el Ayuntamiento podría renunciar a la celebración de este contrato para licitar.

Gracias a los fondos FEDER, Lugo tendrá una pasarela peatonal que permita una conexión segura y cómoda para peones y ciclistas; una medida de movilidad urbana sostenible con la que el Gobierno transformará el carácter de la ciudad, dejando de darle las espaldas al Miño para convertirla en ciudad que prolonga los espacios públicos para su uso público, convirtiendo Lugo en ciudad del siglo XXI. Además, esta inversión es un ejemplo más de como Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER) pueden mejorar la vida de los y de las luguesas, en este caso a través de una nueva infraestructura para unir la ciudad con el Miño favoreciendo la movilidad.

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