Comprobación medidas COVID

Durante la jornada del día 10, los agentes de la Unidad Territorial de Policía de Barrio, se trasladaron a las instalaciones de un centro de ocio de la ciudad y de un hostal de la zona centro, tras recibir sendas reclamaciones telefónicas sobre un posible incumplimiento de las medidas de prevención sobre Covid-19 en dichos lugares.

En ambos lugares, los agentes realizaron una inspección inicial, tras lo cual contactaron con las personas encargadas para informarles del aviso recibido, con intención de que, a pesar de que no se observó ninguna anomalía notoria, extremen el control del cumplimiento de las medidas preventivas, sobre todo dando cuenta de la cantidad de personas que interactúan en ambos lugares.

Actuación en presunto maltrato animal

Los agentes de Policía de Barrio finalizaron una actuación iniciada en los últimos días del mes de julio, sobre una situación de presuntos maltratos animales respeto a seis perros que se hallaban en un domicilio de Santa María de Bóveda.

El día 31 de julio, mediante el Servicio de Lacería,  se procedió al traslado a la Protectora de Animales de uno de los perros, un cruce de mastín,  que se encontraba atado, con escaso margen de movimiento y aparente estado de desnutrición; quedando en el lugar otros cinco perros más: un cruce de pitbull con  american bull, un pitbull terrier, un cruce de american bull con standford y dos pincher.

Después de realizar todas las investigaciones y comprobaciones necesarias, tanto en el referente a la titularidad de los animales, como a su identificación y estado, los policías confeccionaron las siguientes actas:

• 4 denuncias por otras tantas infracciones a la Ley de Régimen Jurídico de Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos, dos de ellas por no cumplir la obligación de identificarlos debidamente con  microchip, ni inscribirlos tanto en el Registro de Animales de Compañía como en los Animales Potencialmente Peligrosos; y otras dos por no concertar su titular el seguro obligatorio de responsabilidad civil.
• 2 denuncias más por infracción a la Ley de Protección y Bienestar de Animales de Compañía de Galicia, por no identificar debidamente a los otros dos perros.

El cruce de mastín, inicialmente retirado para asegurar el mantenimiento de su salud, recibió los cuidados debidos en las instalaciones de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas, informando a los servicios veterinarios que, aunque se encontraba en un estado de delgadez bastante notorio, eso no se podía entender como un estado de desnutrición.

Quejas por ruídos

Durante la noche del martes al miércoles, agentes de Policía de Barrio se trasladaron a una vivienda del Sagrado Corazón, debido a un requerimiento por molestias por ruidos de un piso adyacente. Una vez en el lugar contactan con la requiriente, que muestra un estado de excitación bastante elevado, motivo por el cual, como primera medida, le preguntan por si necesita algún tipo de asistencia sanitaria, respondiendo que no, que sólo necesita que cesen los ruidos constantes del otro piso.

Los policías permanecen durante un tiempo prudencial en la vivienda y en los rellanos de la escalera, sin que fueran capaces de escuchar ninguno de los ruidos a los que hacía referencia la requiriente  por lo que, antes de abandonar el lugar, volvieron a contactar con ella para informarle del procedimiento para seguir se volvía a sufrir las molestias relatadas, comprobando que la mujer presentaba un estado de nerviosismo aún mayor, por el cual requirieron la presencia de los servicios sanitarios, acudiéndose una ambulancia del 061, cuyos ocupantes entendieron oportuno su traslado a un centro médico para su correcta valoración y tratamiento, a lo que se negó en rotundo.

Intervención en discusión (presunta violencia de género)

Durante la noche del martes se recibió, en la Sala del 092, una llamada telefónica informando de una fuerte discusión en un domicilio de la rúa Luis Seoane, en el que reside una pareja, observando que, mismo, habían lanzado desde la ventana un plato hacia la vía pública, motivo por el cual se  comisionan en el lugar los indicativos de la Unidad Territorial de Policía de Barrio.

Una vez en el lugar fueron recibidos por una persona, distinta al requiriente, que indica a los agentes el piso del que procedía la discusión. En dicha vivienda son recibidos por una pareja, cuyos miembros, por separado, manifiestan discutir pero sin que ninguno de los dos resultara vejado o insultado y mucho menos físicamente agredido, añadiendo que, efectivamente, durante la discusión, en un intento de aliviar la tensión que sentía, ella había lanzado un plato por la ventana, momento en el que el vecino que recibió a los policías en el portal subió a llamarles la atención, discutiendo con él y que, posiblemente, esos habían sido los gritos que había escuchado el requiriente, por lo que los agentes abandonaron el lugar, no sin antes informar, tanto a la pareja como al hombre con la que habían discutido, de los pasos a seguir para realizar cualquier denuncia o reclamación.